Pensaba que me querías. Pensaba que era el protagonista principal de tu historia. Más tarde me dije a mi mismo quizás sea personaje secundario o terciario, pues no soy muy destacado, pero al menos mi presencia se ve en tu historia. Ahora me doy cuenta que ésta historia tiene miles personajes...y aquí es donde inicia el sufrimiento..ya que entre estos miles de nombres, no está el mío...no hay nada mío...
Del libro: Las chicas no pueden entenderlo fácilmente
Pouria Alami
Interesante sin dudas...
ResponderEliminarsiempre es fascinante preguntarse enigmas de vida...
como saber quien es el que piensa en uno o es otro el que sueña por uno...
saludos!